¿A qué edad pueden ir solos?

Como es lógico, depende mucho de las características del trayecto: longitud, número de cruces, regulados o no, intensidad del tráfico, etc. Y por supuesto de las características del niño. En general se considera que a los diez u once años suelen tener juicio suficiente y van perdiendo alguna de las características desfavorables que hemos comentado más arriba. Pero solo los padres pueden juzgar si está ya preparado.

Se discute si los trayectos cotidianos son más o menos seguros que los inhabituales. Por una parte, un trayecto ya conocido es previsible, y el niño conoce ya los puntos críticos. Por otro lado la familiaridad puede hacer que presten menos atención a su entorno. Eso sí, el juego y la atención al tráfico son incompatibles. Y el MP3 o el móvil no se deben usar en la calle. ¿Es imprescindible que lo lleven?.

Cuidado con las prisas: en la escala de valores de los niños el riesgo de llegar tarde es más importante que el de sufrir un accidente. Deben salir de casa con tiempo más que suficiente.