La vacunación antigripal reduce el riesgo de hospitalización y fallecimientos y se recomienda vacunar a todos los pacientes con EPOC. Se administra todos los años. A veces, la vacuna puede dar fiebre y malestar que suele durar menos de 48 horas.
La vacuna evita, en la mayoría de los casos, tener la gripe, o al menos, hace que sea menos grave, pero no previene la infección de otros virus, por tanto, puede padecer otros “catarros” durante el invierno aunque se haya vacunado.
La vacuna “frente” el neumococo se pone en pacientes mayores de 65 años con EPOC. Disminuye el riesgo de padecer neumonía y otras complicaciones debidas a la infección por esta bacteria. La vacuna neumocócica está indicada en determinados pacientes con EPOC. Pregunte a su médica/o que le indicará sobre la necesidad o no de administrarse esta vacuna. Las vacunación antigripal y “frente” el neumococo se puede solicitar en los Centros de Salud a principio de otoño, donde la informarán de la fecha de comienzo de la vacunación.