Escuela de SaludEscuela de SaludTodos Somos Salud
Todos Somos Salud
Buscar

Andador

^

Parece mentira que un artilugio tan popular entre padres y familiares de niños pequeños sea tan impopular entre los pediatras. ¿Y eso por qué? ¿No ayuda a que el niño aprenda a andar? Pues no, no ayuda.

 

La técnica para desplazarse con el andador, y los músculos que se usan, son totalmente distintos de los de la marcha normal. Incluso tiene desventajas en ese sentido, ya que el niño no aprende a guardar el equilibrio (no lo necesita), no aprende o aprende más tarde a levantarse del suelo, e incluso favorece que adquieran vicios de la marcha, como por ejemplo andar de puntillas.

 

¿Algo más? Pues sí, el andador aumenta mucho el riesgo de accidentes. Según la Asociación Española de Pediatría, es la segunda causa de accidentes entre los seis y los doce meses. Esto se debe a que el niño se desplaza mucho más rápido de lo que su sistema nervioso puede controlar, le permite desplazarse fácilmente hacia atrás o los lados, con la consiguiente pérdida de control, le permite evadirse mucho más rápidamente de la vigilancia de los padres y alcanzar sitios que no alcanzaría por sí solo, vuelca con facilidad y por último, pero no menos importante, la combinación andador-escaleras (incluso un solo escalón) puede ocasionar accidentes muy graves.

 

 

Compartir en:

Esta web utiliza cookies. Si continúas navegando consideramos que aceptas su uso.
Más información